martes, 5 de abril de 2011

Salón de Vinos Naturales, Barcelona

El pasado domingo 27 marzo fui al III Salón de Vinos Naturales, en Barcelona (Convent de Sant Agustí). Seríamos unos 20 productores de vinos naturales, principalmente de Francia y Cataluña, pero unos cuantos también de otras partes de España y de Italia.


La Feria

¿Qué decir? ¿Que si fue un éxito? ¿Había mucha gente? ¿Me resultó útil? ¿Hice muchos contactos? ¿Me lo pasé bien? ¿Me dolían los pies? ¿Serví muchas copas de vino? ¿Vendí mucho vino? ¿Fue divertida la cena? ¿Saqué muchas fotos y videos?

Pegando las etiquetas

Pues, la contestación es “Sí” a todas las preguntas menos a dos: ‘No’, no vendí mucho vino (unas 20 botellas) y ‘No’, no saqué tantas fotos como me habría gustado! Pero a todo los demás, decir que SI.

Antes de que viniera la gente

Yo diría que fue un exitazo tremendo, y que pasaron por allí centenares de personas. No tengo datos precisos del organizador del evento Benoît Vallée (L’Anima del Vi), pero esa es mi impresión – desde el momento en que empezó a llegar la gente (10:30 – 11:00) no pude sentarme ni abandonar mi mesita hasta las 9:00 de la noche.

Listo para la acción

Conseguí escaparme para ir al baño a eso de las 5:00, pero mi vecino (Alfredo Maestro) no tuvo tanta suerte – me dijo que no pudo ir a mear hasta las 9:00 de la noche! Más señales/evidencia del éxito del evento son mi dolor de pies (de estar de pie durante 12 horas seguidas) sirviendo copas de vino y hablando con la gente.

La cosa se anima

No había manera de ir a comer, claro. Pero Benoît tenía la solución: aparte de los 20 puestos de productores de vino natural, había uno de comida (tapas y raciones) (Bar Cortijo) y ellos se encargaron de traernos comida a lo largo del día. De hecho, mi mayor venta del día fue a ellos – me encargaron una caja de mi ‘vino naranja’ ya que consideraban que maridaba perfectamente con su sushi. (se me olvidó sacar una foto del plato).

3 Airén – mismo viñedo, misma uva, mismo día de vendimia
Izquierda: Vino Naranja (con hollejos)); Centro: Normal; derecha: Maceración Carbónica

¿Que si me ha sido provechoso estar en la feria? Pues, no sabría decir! ¡Desde luego, no por las ventas realizadas! ¿Quizás para ventas futuras? ¡A saber! Creo que sí promocioné y publicité mis vinos y mi proyecto bastante. Distribuí unos 100 folletos y unas 50 tarjetas de vista – y solo se los di a personas que me las pidieron previamente, no por sugerencia mía.

Tintos: Petit Verdot, Sirah, Tempranillo, Garnacha

Lo más interesante fue la gran variedad de gente que se acercó a la feria. Algunos eran amantes del vino con alto conocimiento que me hicieron muchas preguntas difíciles e interesantes! Otros eran novatos del mundo del vino que venían a ver, catar y aprender.

Camiseta con mensaje

En teoría, el evento tenía que terminar a las 5:00 o a las 6:00, pero a las 8:00 seguía lleno! Al final fue la falta de luz la que echó a todo el mundo, ya que no había luz en el convento y solo se podía ver con mecheros y antorchas.

Gracias a la buena planificación de Benoít, el restaurante donde íbamos a comer estaba al otro lado de la calle, por lo que no tuvimos que movernos con vehículos o en transporte público. Solo había que salir del convento, cruzar la calle y entrar en el restaurante.

La Cena de los Productores

Los primeros en llegar nos sentamos en la terraza del restaurante y ¡pedimos cerveza! No es la primera vez que me ocurre. Después de 12 horas de catar vinos, pensar en más vino durante la cena no es recomendable. Mejor ‘descansar el paladar’ con una cervecita o dos!

Vinateros y sus cervezas

Afortunadamente (para los demás clientes del restaurante) nos colocaron en una sala aparte. Hay que reconocer que montamos un escándalo tremendo. Me dio la impresión de que los camareros estaban un poco agobiados. Primero, llegamos todos con botellas (y cajas) de nuestro vino, las pusimos en la mesa, en las sillas y en el suelo, y las abrimos sin más nosotros mismos. ¡Era como si acabáramos de salir de la cárcel! Teníamos tantas ganas de catar los vinos de los demás, Y hasta ese momento no habíamos podido hacerlo por no dejar nuestras mesitas para catar a gusto!

En la mesa

Cuando consiguieron hacernos entrar y sentarnos, a nadie le interesaba la comida, y los camareros no podían tomar la nota. Yo ni siquiera vi el menú, y mucho menos pedir algo! Al final Benoít pidió 30 entrecotes con patatas, y 30 entrantes para todos.

Entonces la fiesta se animó. Primero un pequeño discurso de Laureano Serres, productor de vinos naturales y presidente de la PVN (Asociación de Productores de Vinos Naturales), en catalán; no sé cuantos entendieron algo, pero si que puedo decir que recibió una ovación cerrada al terminar!

(Enlace con el discurso: http://www.youtube.com/watch?v=hDdtswX9Q9M )

Alguna gente empezó a fumar en la mesa – cosa que ahora está prohibido desde la nueva ley anti-tabaco del 2 de enero. Pero en esos momentos, ¿quién se iba a acordar? No, hombre, no, estoy exagerando - los fumadores nos salimos fuera tambien (algunas veces).

He aquí algunos de los vinos:

Quizás el más conocido sea el de Thierry Puzelat (uno de los fumadores!):

Pendiente : foto Puzelat "in Cot we Trust"


Pendiente: foto Laureano Serres "Brutal"


Pendiente foto Clos du Tue-Boeuf Touraine Le Buisson Pouilleux


Pendiente fotoEls Bassots - Jordi Escodà


Pendiente fotoVinya SanFeliu


Pendiente fotoMacon Cruzille Manganite


Pendiente foto Dinavolo (Italia)


Pendiente foto Alfredo maestro
 
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